Raúl González Blanco, el Gran Capitán, el ex-futbolista, el mayor cáncer de todos los tiempos. Desde que este señor heredó la capitanía hace 6 años, en el verano del 2003, tras la ejecución de Fernando Hierro, el bagaje del equipo han sido 2 ligas (de las que hablaré luego) 0 Copas de Europa, 5 eliminaciones en octavos de final en Copa de Europa y 0 Copas del Rey. Si, 2 ligas, una con Capello, ganada en igualdad de puntos con el Barcelona, aquella liga de las remontadas imposibles, aquella liga de los dos goles de Reyes, de los goles de Van Nistelrooy y Tamudo en la penúltima jornada casi al unísono cuando el título estaba perdido ¿ven por algún lado al Gran Capitán?, y la otra, la de Schuster, ganada gracias al tremendo trabajo que hicieron Ronaldinho y Deco en el vestuario blaugrana (el mismo que ahora hacen Raúl y Guti), ganada en aquella remontada en el Reino de Navarra con diez jugadores, con Heinze en la banda con un dedo roto y con goles de Robben en el 87 e Higuaín en el 89 ¡ah si!, y con Raúl sustituido en el minuto 19 de la segunda parte por el Pipita. Desde que este señor tira del carro han desfilado por el club una lista innumerable de entrenadores (Queiroz, Camacho, García Remón, Luxemburgo, López Caro, Capello, Schuster, Juande, Pellegrini), presidentes (Florentino Pérez, Fernando Martín, Luis Gómez-Montejano, Ramón Calderón, Vicente Boluda y otra vez Florentino Pérez> y jugadores (la lista sería interminable). Nueve entrenadores y seis presidente en seis años, esto da una idea del desgobierno que existe en el club, y ante la falta de gobernantes siempre hay un dictador que asume el poder, y este no es otro que Raúl, que hace y deshace a su antojo, pone y quita presidente y entrenadores, usando a la prensa y a su fiel escudero Ginés Carvajal. Hoy ya tenemos en la portada del Diario Inda la cabeza de Pellegrini, y todo porque los concentra, mañana vendrá Laudrup y en cuanto los haga correr nuevo motín a bordo, por parte del capitán patapalo. Por todo esto y mucho mas, el señor González Blanco no debe vestir nunca mas la camiseta del Real Madrid, es mas, el señor González Blanco debería tener prohibida su entrada de por vida a las oficinas del club, no vaya a ser que le de por seguir los pasos de su descubridor y nos lo encontremos un día de Entrenador, Director Deportivo, Director General o incluso de Presidente, cargos, que desde hace 6 años lleva ejerciendo en la sombra.
Son datos tan demoledores e irrebatibles que ayer Pellegrini, bien informado y posible lector de blogs antirraulistas, se los tiró a la cara de los periodistas, dejándolos en evidencia:
Quizá porque ya vea todo perdido, Pellegrini aireó las recientes vergüenzas del Madrid, donde "se han cambiado ocho o nueve técnicos en los últimos años y sólo se han ganado dos títulos". Para el chileno, el continuo movimiento en el banquillo blanco "hace que el club no tenga línea de juego". Un esquema diferente del contragolpe "Yo lo estoy cambiando y eso no se hace en poco tiempo".
Su tono dicen que fue desafiante. Tiene que serlo y señalarles como culpables de parte de lo sucedido en esta oscura era del raulismo. Pellegrini y Florentino tienen que ser ahora fríos e inmisericordes con quien ha utilizado el club como su cortijo, pasando por encima de quien fuera y como fuera, incluidos ellos mismos. Incluso los más afines a su causa, por motivos obvios, le señalan como se señala a Satanás:
RAÚL, EL PODEROSO
Cuentan los que se acercan a Valencia, donde reside la hija de Juande Ramos, que el extécnico del Madrid, despedido ahora del CSKA, señaló en su día a Raúl González como el gran culpable de la situación del Real Madrid. La chica explica a quien quiera oírle que Raúl es quien toma las decisiones en la Casa Blanca. El párking número 1 de Valdebebas es el suyo. Por algo será.
Emilio Peréz de Rozas
La naturaleza vil y traidora de este monstruo creado y alimentado por la prensa, no merece ninguna piedad. Hoy jugamos contra el Getafe, debió ser fulminado como Guti por la ira del ser superior, pero nos hemos quedado con dos opciones, o Raúl titular para que el Bernabeu lo sentencie, u ostracismo confiando en el buen hacer del resto de sus compañeros. Parece que será lo segundo, pero pagar, este señorito debe pagar, dejando claro a cualquiera que todo lo que ha hecho no sale gratis. Debemos ser implacables.