Misma mierda, nuevas motivaciones

Raúl va a destrozarnos un año más. Está claro tras su intocable titularidad. Esta claro tras eliminar cualquier atisbo de competencia, se tratase de quien se tratase. Esta claro tras el comportamiento del Bernabeu con el maestro de la patapalina.
Poco nos podemos esperar de esta temporada para nuestro equipo. Hemos visto ya demasiadas veces esta película.
No obstante todavía nos quedan cosas interesantes que observar durante este curso. La primera es la cantidad de GIFs y cagadas con las cuales podremos elegir si reir o llorar. El equipo no jugará una mierda, pero ¿y lo entretenido que está uno esperando la próxima torpeza del intocable?

La segunda es ver como evolucionará un fenómeno que ya está definiéndose con claridad. Hay una ruptura entre la mayoría de socios que acuden al Bernabeu y el resto del madridismo que no tiene esa suerte. Esto, que yo recuerde jamás se había dado. Las encuestas lo han dejado claro, los murmullos, risas y juramentos en los bares también. A Raúl se le acabó el crédito, el cachondeo es generalizado. Sin embargo en Chamartín, muchos hasta le ovacionan. ¿Qué está pasando? ¿A qué se deben criterios tan dispares? ¿Vemos cosas diferentes? Yo creo que no. Vemos lo mismo, pero una parte está sugestionada. La opinión de unos, los antirraulistas, no se corresponde precisamente con el bombardeo al que nos someten los medios de masas. Las frases machaconas, los datos tendenciosos y los argumentos trasnochados son, en cambio, coincidentes en los mass media y en la masa raulista, como la que suele acudir al estadio a idolatrarle. Sinceramente creo que es un caso de estudio sociológico y de marketing sin parangón.